Por segunda vez en el 2017, y para despedir el año de la mejor manera posible, el grupo de Caridad y Misión nos fuimos a Mejorada del Campo el día 29 de diciembre.
¿Por qué Mejorada?
Allí está de párroco el Padre Curry y le conocemos desde hace tiempo. Hemos tenido unos cuantos encuentros con él desde hace ya varios años (antes estaba de párroco en Torrejón de Ardoz). El Padre lleva en Mejorada del Campo poco tiempo y está intentando acercarse y llegar a todo el pueblo, de ahí que organizásemos una evangelización.
Qué mejor manera de empezar la tarde-noche de misión que participando en la Santa Misa en la Parroquia de la Natividad de Nuestra Señora.
Después de la Eucaristía, y para ponernos en manos del Señor y la Virgen, tuvimos un rato de oración con el Santísimo expuesto. El Padre Curry nos dio una serie de puntos que nos podían ayudar a la hora de lanzarnos a las calles como apóstoles misioneros.
Tras haber tenido un rato de encuentro con el Señor y recibir la bendición del Padre, nos pusimos en marcha. Era momento de ponerse en manos de Dios y salir a evangelizar.
Unos cuantos, entre ellos el coro, nos quedamos en la Iglesia recibiendo y acompañando a toda persona que se acercase a tener un encuentro con el Señor. Otros cuantos salimos a las calles para intentar llegar a la mayor cantidad de gente posible y siendo conscientes de que somos unos meros enviados del Señor y que es Él el que se encarga de hacer el resto.
En definitiva, el objetivo era compartir la alegría y el amor de ser hijos de Dios y que todo el mundo tenga la oportunidad de conocerle.
El resultado fue un auténtico regalo. El señor inundó de su amor a cantidad de personas y encima consiguió aumentarnos la Fé a nosotros también. Cuando te das a los demás y te entregas, como efecto boomerang, recibes un soplo nuevo de alegría y amor de Dios. Una auténtica bendición para terminar el 2017.
