La Javierada de 2017 está llena de ilusión y preparativos, llegamos a Javier el domingo 5 marzo. 380 personas del Mater Salvatoris. El grupo de alumnas y Montañeros eran 209, el de jóvenes profesionales unos 60 y el grupo de familias que sumaban 100 personas, para presentarnos ante el santo y pedir su protección e intercesión.
El viernes con un temporal en el camino de lluvia y nieve, los augurios eran bastante desanimantes pero el sábado se nos regaló un día espléndido con un sol increíble. En el camino rezamos el Rosario y compartimos un gran día.
Comenzamos la Javierada con Misa en Ujué en esa iglesia fortaleza, presidida por el padre Paco y el padre Pablo que nos acompañó espiritualmente y andando en esta peregrinación.
Al acabar la Misa, arrancamos todos juntos para, al cabo de un rato, separarnos cada grupo por su camino con un fin único: llegar a Javier.Las familias, de todas edades, mayores y pequeños, anduvimos con pie firme. 16 km. sin prisa y sin pausa incluidos carritos y coches escoba que estaban al auxilio de los cansados, niños y “heridos”.Comimos en un prado precioso, al calor del sol y rodeados de verde. Un auténtico día primaveral. Un día lleno de gracias.
Al finalizar la etapa, regresamos al albergue en Beire, donde a continuación, después de jugar los niños y descansar un poco los adultos, tuvimos una Hora Santa, los niños muy cerquita de Jesús y todos cantando, adorando y alabando. Después, compartimos una cena estupenda. Pronto nos fuimos a dormir para el madrugón del día siguiente.
A las 6.00 am del domingo en pie, alegres y con un día un poco más lluvioso, nos pusimos en marcha desde el restaurante Yamagochi los 8kms para unirnos a todos los grupos del Mater para llegar hasta el castillo de Javier. En el camino, rezamos el Via Crucis. Llegando de los primeros a la explanada, la lluvia no fue obstáculo ni aminoro la marcha. Antes de la Misa, los diferentes grupos se iban presentando desde distintos lugares de España; Murcia, Sevilla, Madrid, Barcelona, Pamplona, San Sebastián… Después de la Misa, llegó el momento de la entrega de pañoletas a los jefes de Montañeros. Y el broche final: la foto de familia MATER .
YA CON GANAS DE VOLVER A JAVIER EN EL 2018
Regresamos a Madrid felices, cada uno a su ritmo, con el alma encendida y felices de la peregrinación. Con el mismo espíritu de San Francisco Javier
¡MÁS, MÁS Y MÁS!
Beatriz LQ